Historia del nacimiento de ATAKU (Cooperativa de Colonización Argentina Ltda.)
Al finalizar la Segunda Guerra Mundial, miles de personas de origen japonés que vivían en distintas colonias de Asia, comenzaron a regresar a Japón escapándose de la derrota de la referida contienda, lo que provocó una saturación en la población. En la búsqueda de soluciones a la situación planteada, el gobierno japonés estableció como política nacional, la promoción de la emigración hacia Sudamérica y Centroamérica.
En la Argentina ya se encontraba establecida una gran comunidad de japoneses llegados antes de la Segunda Guerra Mundial..
En la época de posguerra, Argentina todavía no aceptaba oficialmente el arribo de contingentes de inmigrantes japoneses, por lo que su llegada al país era realmente difícil. Las oleadas de ciudadanos japoneses lo hacían en forma desordenada y sin una planificación previa. En ese contexto por iniciativa de las autoridades de la Embajada Japonesa en la Argentina, se reúnen con los más destacados residentes japoneses locales para encontrar una solución al problema. En esas circunstancias nació ATAKU el 10 de octubre de 1953, quien se constituyó como un órgano encargado de la recepción de inmigrantes.
Recepción de los Inmigrantes (Década 1950/60)
Entre los años 1955 y 1958, antes de que el flujo de inmigrantes japoneses llegara a la Argentina, gran cantidad de personas de ese mismo origen ingresaron al país para continuar su viaje con destino al Paraguay (Aproximadamente 2600 inmigrantes). ATAKU, cumpliendo con sus funciones se encargó de facilitarle los trámites migratorios y los llevó desde el Puerto de Buenos Aires hasta el lugar elegido para su radicación en el país vecino.
En 1957, nuestra Institución había logrado obtener el permiso de las autoridades Argentinas, para desempeñarse como un agente encargado de realizar los trámites migratorios de los ciudadanos japoneses que llegaban al país. Esta actividad se llevó a cabo antes de la aprobación del acuerdo político sobre inmigrantes entre ambas naciones (en 1964). El resultado de la gestión de la Cooperativa fue muy significativa, ya que solucionó muchos de los problemas que existían en el proceso de migración, permitiendo obtener el permiso de entrada de más de 400 familias para su posterior establecimiento en la Colonia Garuhapé (Luján) en Misiones y de 60 jóvenes por año que llegaron para desempeñarse como floricultores en distintos lugares del país entre 1961 y 1963.
Desde entonces, la Cooperativa realizó un total de 2640 trámites para el ingreso y asentamiento de inmigrantes. Además, se encargó de concretar los trámites para representantes de empresas japonesas que llegaban al país. Al respecto, es importante destacar que más allá de facilitar los trámites migratorios, lo más trascendente fue el apoyo y la contención afectiva que les permitió integrarse con mayor facilidad a la sociedad local.
Otra responsabilidad de la Cooperativa en el proceso de radicación de las colonias, fue la elección de la actividad y la selección de las zonas más adecuadas para su desarrollo, lo que influyó decisivamente en los resultados de la tarea. En este sentido ATAKU recorrió prácticamente toda la geografía nacional reconociendo, investigando y analizando las zonas más aptas para el establecimiento de las Colonias, recibiendo el apoyo y la cooperación de la Embajada del Japón y de JICA (Agencia de Cooperación Internacional del Japón).
Apoyo al desarrollo de la producción y de la calidad de vida (1960-1990)
El número de inmigrantes que alcanzó su punto máximo aproximadamente entre los años 1959-1960 y luego fue disminuyendo paulatinamente hasta el presente, a medida que la situación iba cambiando, también se modificaba la función de la Cooperativa. Las nuevas exigencias estaban orientadas a optimizar la producción agrícola y lograr la expansión de los canales de venta de los productos. ATAKU orientó sus actividades a la importación y el suministro de nuevos productos agrícolas, en este sentido consiguió un registro como importador y exportador, para traer semillas, plantas, maquinaria agrícola, plaguicidas, fertilizantes y exportar productos producidos por sus asociados, otra de las funciones fue el. estudio e investigación de nuevas actividades como por ejemplo la apicultura. También se abocó a la búsqueda de una mejor rentabilidad de los productos de sus asociados, consiguiendo un puesto en el mercado central mayorista de Buenos Aires para realizar la venta minorista de los mismos.
A partir de 1970 fue decreciendo progresivamente la llegada de inmigrantes, lo que instaló la preocupación por el tema del envejecimiento de la primera generación de inmigrantes. Como consecuencia de esa situación, en 1978 ATAKU conformó un comité para la construcción de un geriátrico, quienes pusieron todo su empeño en la búsqueda de ayuda económica para financiar dicho proyecto. En agosto del mismo año pudo inaugurar “Nichia Centro de Asistencia Social”, pero lejos de conformarse con esa situación, continuó ampliando y mejorando la idea consiguiendo subsidios de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA), logrando que el Centro original de Asistencia Social, finalmente se transformara en “Nichia-Sou Casa de los Ancianos", con gestión independiente.
Desde el año 1985 la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) comenzó a enviar a la argentina a jóvenes profesionales para difundir la nueva tecnología agrícola, ATAKU en su rol de órgano receptor de inmigrantes, asesoró y asistió a estos jóvenes facilitándoles su adaptación al medio.
La Cooperativa de Colonización Argentina conjuntamente con la Federación Nacional de Cooperativas Agrícolas de Colonización (JATAK), desde 1995 se dedicó a la planificación y al desarrollo de temas relacionados con la agricultura, enviando un gran número de agricultores jóvenes Nikkei como becarios, quienes asimilaron los conocimientos y aprendieron la tecnología más avanzada del Japón, lo que contribuyó a elevar significativamente el nivel de los emprendimientos agrícolas de la comunidad japonesa y consecuentemente benefició a la actividad agrícola argentina.
Alejandro Hisaba estudiando agricultura en Japón Mariano Nakagawa, un becario de JATAKU
A partir del 2000, un mayor compromiso con la protección del medio ambiente
En concordancia con la creciente sensibilidad social sobre el cuidado de la naturaleza, el cambio climático, la conservación de los espacios naturales, el paisaje, etc., ATAKU, aprovechando las condiciones naturales que ofrece la geografía misionera, tiene previsto ampliar y mejorar su emprendimiento forestal, poniendo énfasis y atención al cuidado del medio ambiente y al manejo sustentable de la actividad.
Imbuido del espíritu que anima a muchas organizaciones e instituciones en el mundo preocupadas por este tema, ha decidido comprometerse en la búsqueda de soluciones efectivas, mediante la puesta en acción de proyectos que contribuyan a neutralizar el creciente deterioro del medio ambiente y mejorar la calidad de vida de la población.
Pino Paraná (ARAUCARIA)
Concluida la etapa fundacional, los miembros de la cooperativa aprovecharon la experiencia adquirida en sus inicios, aunaron sus cualidades y capacidades, afianzaron y expandieron sus actividades, procurando satisfacer las necesidades y las expectativas esenciales de sus asociados, participando activamente en la fundación de nuevas Colonias en el Gran Buenos Aires y en el interior del país.
El Ministro de Turismo de Misiones, el Embajador de Japón (Ishikawa) y el Representante de JICA (Furuya) en el 50° aniversario de Colonia Garuhapé (Luján) El presidente (Miyai) y el Sindico (Nakamura) de ATAKU, con un producto de la Colonia (Mandioca)